El periodismo preso del terrorismo de Hamás y la Yihad islámica

17.02.13
el equipo editorial de la FDI

Publicado en: 17 de febrero, 2013

Cuando Israel inició la operación Pilar Defensivo, los terroristas en la Franja de Gaza sabían que estaban bajo la mira de las FDI. Por ello cuatro jerárquicos comandantes de la Yihad Islámica Palestina tomaron una oficina en el edificio central de telecomunicaciones de Gaza. En este edificio se encuentran las sedes de las principales agencias de noticias internacionales.  

Los terroristas usaron a los corresponsales como escudos humanos, escondiendose en un edificio civil. Cuando las fuerzas de inteligencia hallaron el escondite, se alcanzó con precisión el objetivo. Se detectaron impactos exitosos.

Estos son los cuatro terroristas de la Yihad Islámica que las FDI alcanzaron:

  • Baha Abu al-Ata: Comandante de la Brigada de la Ciudad de Gaza de la Yihad Islámica; involucrado en la planificación de ataques contra Israel y la fabricación de armas y cohetes de largo alcance.
  • Tissir Mahmoud Mahmed Jabari: Jerárquico comandante de la Yihad Islámica; responsable de la instrucción dentro de la organización y la aprobación de ataques terroristas contra Israel.
  • Halil Batini: Comandante de alto rango de la Yihad Islámica; un principal eje en la planificación de ataques con cohetes de largo alcance. Responsable de la seguridad interna.
  • Ramez Harab: Responsable de la propaganda de la Brigada de la Ciudad de Gaza de la Yihad Islámica; auxiliar a Tissir Jabari; ex comandante de la división de Sheikh Rajuan.

La Yihad Islámica confirmó que sus operativos se habian escondido en el edificio de la central de telecomunicaciones y uno murió en el ataque.

La agencia AP twitteó en inglés:

Actualización: El grupo Yihad Islámica de Gaza afirma que en el ataque israelí en el centro de telecomunicaciones murió un líder miliciano.

Hamás usaba un edificio de telecomunicaciones para sus operaciones militares

durante la Operación Pilar Defensivo, terroristas palestinos usaban una oficina en un edificio de telecomunicaciones para sus objetivos militares.  Por ejemplo, al 7o piso de un edificio de telecomunicaciones en el distrito Rimal de la Ciudad de Gaza, Hamás operaba un centro de comando y de inteligencia. Las FDI lo alcanzaron quirúrgicamente.

Cerca de allí, desde zonas civiles densamente pobladas, los terroristas palestinos lanzaron cohetes hacia Israel. Periodista Anderson Cooper de la cadena norteamericana CNN, reportó desde la escena:

“4 cohetes se acaban de disparar desde el área del centro de telecomunicaciones en la ciudad de #Gaza. El mismo edificio que fue alcanzado por 3 misiles de las FDI hoy.”

En otro edificio de los medios, utilizado por periodistas internacionales, Hamás utilizó antenas en el techo para comunicarse con sus agentes sobre el terreno. El 18 de noviembre, las FDI alcanzaron estas antenas.

Terroristas de la Yihad Islámica Pintaron “TV” Sobre el Capó de un Carro

Escondiéndose entre periodistas no es el único método de los terroristas palestinos de esquivar la represalia de las FDI. A veces, los terroristas se disfrazan como periodistas. La única cosa que tienen que hacer es pintar las letras “TV” sobre su carro y las FDI estarán acusados de alcanzar a periodistas inocentes.Este es lo que pasó el 19 de noviembre.

Muhammed Riad al-Shamalah, el comandante de los milicianos de la Yihad Islámica en el sur de Gaza y el jefe de los programas de entrenamiento militar de la Yihad Islámica, conducía un Mitsubishi Lancer negro en la Ciudad de Gaza cuando las FDI golpearon la parte trasera de su coche. La televisión palestina luego transmitió imágenes del carro que tenía las letras “TV” pintadas con spray sobre el capó.  No había equipo de telecomunicaciones o televisión dentro del vehículo.

Terrorismo de Gaza

PERIODISMO POR EL DÍA, TERRORISMO POR LA NOCHE

Al-Shamalah no tenía conexiones con los medios/no tenía nada que ver con los medios/no tenía relaciones con ninguna red de los medios. Pero, este no es el caso de todos los operativos de Hamás y la Yihad Islámica quienes declaran que son “periodistas.” Unos de ellos, de hecho, llevan cámaras de televisión, pero reciben sueldos de una organización terrorista y sirven sus objetivos.

Por ejemplo, Mahmoud Al-Kumi y Hussam Salama eran operativos de Hamás y camarógrafos de la cadena de televisión de Hamás, Al-Aqsa, que regularmente presenta programación que promueve ataques contra civiles israelíes. El 20 de noviembre las FDI alcanzaron a Al-Kumi y Salama.

Los medios palestinos reportaron que estos dos hombres fueron operativos de Hamás.

Terroristas de Gaza

Mohammad Thouraya, el jefe de la cadena de televisión Al-Aqsa TV, negó las acusaciones serias que Al-Aqsa TV era la voz de Hamás, algo dificil a negar, siendo que la cadena es financiada y controlada por Hamás, aún él admitió que sus empleados son integrantes “de la resistencia.”

Ser un “integrante de la resistencia”, en otros términos, podría ser alguien que lleva una cámara durante el día y lanza cohetes durante la noche.

Otro ejemplo: Mohammed Abu Aisha era un empleado de la Radio Al-Quds, una cadena que varios medios de comunicación etiquetaron como “cadena educativa.” Abu Aisha fue también un operativo de la Yihad Islámica, y esta es la razón que las FDI alcanzaron su coche el 20 de noviembre. Abu Aisha aparece en la página oficial de la Yihad Islámica en un uniforme de la organización.

Terrorismo de Gaza

ENTONCES, ¿QUIÉN ES UN PERIODISTA?

Entonces, ¿deberíamos considerar a un alto comandante de la Yihad Islámica que pinta las letras “TV” sobre el capó de su coche un periodista? ¿Un camarógrafo de una cadena de televisión de Hamás debería ser considerado un periodista? ¿Y un presentador de una serie de radio que lleva el uniforme de un grupo terrorista puede ser un periodista?.

Si la respuesta a estas tres preguntas es “sí”, la línea que distingue la diferencia entre un terrorista y un periodista está confunsa y no hay un estándar de definir que es un periodista---es probable que los terroristas palestinos seguirán usando el periodismo como un pretexto para el terrorismo.